viernes, 18 de marzo de 2011

HOY INVITO A... MARIALUISA AGNESE (LA EDAD DE LAS MUJERES)

CON FRECUENCIA NOS PREOCUPAMOS POR LA EDAD CON LA QUE NOS VEN. ¿NOS PREOCUPAMOS POR LA EDAD QUE REFLEJAMOS NO TANTO POR NUESTRO CUERPO, SINO POR NUESTRA MENTE? LLEGAN MOMENTOS DE LA VIDA EN LA QUE SER CAPACES DE VALORARNOS POR NUESTRO INTERIOR NO ES UNA EXCUSA DE CONSOLACION ANTE LA PERDIDA DE "TODO LO DEMAS", SINO LA POSIBILIDAD DE DESCUBRIR LO QUE DE VERDAD ACABA VALIENDO EN LA VIDA. ESTE ARTICULO DE LA PERIODISTA ITALIANA MARIALUISA AGNESE NOS UBICA MAS ALLA DE LO QUE LAS MODAS PROPONEN Y NOS INVITA A VIAJAR A ESE CONTINENE EN QUE LAS PERSONAS VALEN  POR LO QUE SON Y NO POR LO QUE APARECEN



Entrando en Milan, en el espacio milanés de Rossana Orlandi, lugar de compras especiales que el mundo nos envidia, se queda uno paralizado por un pequeño cuadrito sobre el que brilla una frase fatal: “las mujeres inteligentes tienen la edad que deciden tener” fechado el 26 de octubre de 2010 y firmado Nicò – por Nicoletta Poli – visto como cuenta la misma Roxana en una fiesta de cumpleaños y enseguida querido como ayuda de camino y como recordatorio a hombres y mujeres que se debaten en las dificiles espirales de la estética contemporanea. Todos sometidos al código vencedor que nos quiere bien estirados sin los signos del tiempo, botoxizados y muchas veces estirados sobre la mesa del cirujano plastico para alcanzar dueños fatigosos e imposibles de eterna juventud. En una lucha continua contra el tiempo y la naturaleza y también contra el arte, tan bien representada por Gustav Klimt en la obra las tres edades de la mujer.

Y sin embargo el cuerpo de las mujeres se convierte en una obsesión como ha narrado Lorella Zanardo en su documental sobre lo que se ve desde hace tiempo en la televisión, un desfile de muchachas frescas y orgullosas que bailan o llevan sobres en la esperanza de desfilar un dia quienes sabe si hacia el gobierno o hacia el parlamaneto. Pero en la ilusión de poder todo, incluso la de huir del tiempo, al final ni siquiera cree el titanico autor del Fausto Johann Wolfgang Goethe. Y he aqui que más que embarcarse en desgastantes empresas vanamente reconstructivas, será mejor aceptar el sabio consejo de Nicoletta (que en cuanto filosofa sabe mucho) y que en el fondo, en el fondo esconde, al menos para las mujeres también una operación de conciencia cultural.

En este equipo de mujeres periodistas que enfrenta las acrobacias de la mujer contemporánea para tener junto todo, casa, hijos y trabajo – un grupo de colegas vastamente heterogéneo por experiencias y edad– son quizás la de más edad. Pero no me hecho nunca un lifting incluso porque tengo un miedo loco de las consecuencias, sobre todo la de no reconocerme al despertar, y sé que cuando me dicen “qué bien estás hoy” y un poco mienten y otro poco no, porque quizá ese día han captado una expresión más serena y en las jornadas en las que estás relajada, incluso la frente está lisa, los ojos brillantes y no hundidos, y la edad ya no cuenta la edad, cuenta lo que sabes transmitir a los demás. Y entonces ayudamos a nuestra mente a ser libre, entrenada y flexible y más que a la elasticidad de la piel pensamos de la de la mente. Para poder presentarnos a los demás de modo que no se fijen en la edad. O incluso mejor que se olviden de ella, y sobre todo olvidémosnos nosotros en primer lugar. ¿Que dicen? ¿Mejor correr detrás del botox que por otra parte en un largo plazo es insostenible, o buscar otros caminos para demostrar la edad que se quiere tener?

No hay comentarios: