miércoles, 6 de febrero de 2013

UN CUERVO DE ALTOS VUELOS


Este pasado domingo, cuando veíamos como Joe Flacco, el mariscal de campo de los Cuervos disparaba el balón, podríamos no fijarnos en que lo hacía gracias a un hombre que le estaba cubriendo de los atacantes contrarios. Este hombre era Michael Oher, tackle derecho de los Cuervos de Baltimore, protagonista de una inspiradora historia que estaba detrás del supertazón que los Cuervos de Baltimore le ganaron a los 49es de San Francisco. Para comprender esto les quiero compartir la historia de Michael Oher. 
Nacido en Memphis, en el estado de Tennessee, tuvo una muy difícil infancia. Su madre, una adicta al alcohol, y su padre pasaba mucho tiempo tras las rejas de la prisión, donde incluso llegó a fallecer. Esta situación generó una gran inestabilidad en Michael, quien hizo la primaria en nueve años y en once escuelas distintas. Mientras, había ido rebotando de un hogar adoptivo a otro. Una providencial decisión del director de su escuela le permitió mantenerse en los estudios y el deporte, encontrando en el futbol americano un ambiente para poder desahogar sus conflictos internos. Esta misma providencia le hace llegar, en el año 2004, al hogar de una pareja que tenía a un hijo y a una hija en la misma escuela a la que él iba: el hogar de los Tuohy. Este matrimonio, consciente de su difícil infancia, comenzó a sanar sus heridas interiores y le ayudó académicamente con un tutor que le daba a Michael hasta veinte horas de clase por semana. Este esfuerzo no fue inútil. Oher fue mejorando su rendimiento deportivo y sus calificaciones, de modo que consiguió inscribirse en la Universidad de Mississippi, donde fue nombrado All American, por ser el mejor en un equipo colegial en los Estados Unidos. Hollywood captó el potencial de esta historia y la transformó en película, con el título The Blind Side (Un sueño posible), buscando dar respuesta a una pregunta "¿quién es Michael Oher y qué estrellas se han alineado para que un chico de los suburbios de Memphis llegue a brillar tanto?". También la película fue ganadora, en esta ocasión de un oscar para Sandra Bullock, que interpreta a la madre adoptiva de Michael. 
La superación de un muchacho que estaba llamado al desastre personal, se convirtió en una historia de motivación gracias a dos cosas. Por un lado, la indudable voluntad de superación de Michael, y, por otro, la maravillosa solidaridad de quienes lo acogieron como uno de los suyos, lo comprendieron, lo animaron, lo sostuvieron. Esta historia maravillosa nos permite descubrir que, en el camino de la vida, no siempre las cosas salen adelante por la voluntad de uno solo, así como no basta la solidaridad de los demás con el que sufre. Cuando se quiere salir adelante en la vida es necesario que uno busque superarse, mejorarse, cambiar. Pero también es necesario que reconozca las manos que se le tienden generosamente para que pueda seguir subiendo. A Michael no le habría bastado la superación, si no hubiera tenido la solidaridad. A la familia Tuohy, la familia adoptiva de Michael, no le habría servido su solidaridad, sin el esfuerzo de superación del muchacho. Esta unión de voluntades, permitió que, en el 2009, Michael diera el salto a la NFL, culminando su carrera con la victoria de los Cuervos en el pasado supertazón. Todos podemos estar en la vida en un lado o en otro de la historia de Michael Oher, todos podemos ser llamados a superarnos, o llamados a ser solidarios. Lo importante es recordar que nuestra superación personal siempre estará acompañada de la solidaridad generosa de otros y que, por nuestra parte, tendremos que tener los ojos abiertos para descubrir a quién le podemos ofrecer una mano para subir un poco en la vida.

1 comentario:

Osvaldo dijo...

Siempre me han gustado las historias del futbol Americano y por eso me interesa poder ver películas que refieren a este deporte. Si bien nunca jugue me gustaría alguna vez viajar y ver un partido. Es por eso que quisiera obtener Vuelos a San Francisco a un gran precio